Eso es lo que deberán abonar en Cataluña los estudiantes de formación professional de grado superior que opten por el nuevo curso específico como vía de acceso para cursar su título.
La Consejera Rigau, al igual que cuando anunció el Decreto de ordenación de la FP en Cataluña, ha dado la impresión que presentava una novedad de su administración cuando, en realidad, igual que en aquella ocasión, el establecimiento y la regulación pertenecen a los gobiernos anteriores, autonómico y central, respectivamente.
Efectivamente, los cursos de acceso específico al la formación profesional se establecieron y regularon en el RD 1147 de 29 de julio de ordenación general de la formación professional del sistema educativo, ese RD que el ministro Wert se apresuró a diferir al curso 2014-2015 a través del Real Decreto Ley 14/2012 de medidas urgentes de racionalización del gasto público en el ámbito educativo. Antes de ordenar la medida, algunas comunidades ya tenían avanzada su próxima aplicación, por lo que la norma no tuvo más remedio que permitir, a pesar del diferimiento, que éstas pudieran anticipar la implantación de las medidas que consideraran necesarias.
La novedad de los cursos radica en que, una vez aprobados, dan el acceso directo a la formación profesional sin tener que superar la prueba de acceso. En el caso del acceso al grado medio, se prevé un curso de 600 horas, centrado en las competencias básicas de la ESO. Para el curso acceso al grado superior, se prevé una duración mínima de 700 horas, con la condición de que deberá poseerse un título de Técnico de Grado Medio para poder acceder. De facto, representa un curso “puente” para los alumnos que quieran acceder dela FPGM a la FPGS.
La opción parece, a priori, razonable y positiva, con toda la prudencia que aconseja el hecho de desconocer su regulación y los detalles de su implantación. Hay una cosa que sí sabemos: el curso de acceso al grado superior tiene estipulado un precio público de 240 euros y, el de acceso a grado medio, que además, parece que solo se ofertará en centros privados, de 190.
Después del establecimiento de las tasas, la Consejería vuelve a endurecer las condiciones de acceso imponiendo nuevos precios a la Formación Profesional. Por cierto, en contra de esas tasas ya se han organizado algunos profesores en una campaña de recogida de firmas por la gratuidad de las enseñanzas profesionales y en contra de las tasas: http://ves.cat/bek6, conscientes de la discriminación que supone para muchas familias y alumnos/as. Nos va a valer mucho la pena que les echemos tod@s una mano.